El golfo de Nápoles tiene maravillosas sorpresas donde se distinguen las Islas más importantes: Capri, Ischia y Procida.
Aunque estén cercanas, cada una tiene su encanto, su belleza y características propias. Llevan historias distintas con sus culturas y tradiciones milenarias.
Capri es nombrada la isla azul porque en cualquier lugar donde uno se encuentre su mirada se pierde en el azul del cielo y del mar. Está formada por una roca caliza blanca que parece una perla salida del mar.
Ischia es llamada desde siempre la isla verde por su flora que empieza por el pico más alto del monte Epomeo y termina a las orillas del mar. Tiene al mismo tiempo, mar, colina, montaña y aguas termales. Los matices verdes de la flora y del mar le dan un aspecto de preciosa esmeralda.
Procida se puede llamar la isla colorida. Pintoresca y marinera tiene todavía sus rasgos mediterráneos del pasado. Las casas de los pescadores están pintadas con muchos colores y juntas parecen una paleta de un pintor.
Quizás una isla es más famosa que las otras, pero todas merecen ser visitadas porque en cada una se puede vivir una experiencia diferente.